¿Tecnología o Metodología?

Holaaa!

Esta segunda entrada será para reflexionar, antes de meternos en faena, sobre las tecnologías y la forma de utilizarlas.

 He encontrado un video que me ha llamado bastante la atención. Está muy relacionado con la pregunta que se propone como título de esta entrada: ¿Tecnología o Metodología?

El video refleja una clase de primaria en la que la profesora utiliza un método tradicional para que los alumnos aprendan la tabla de multiplicar en matemáticas. Es un método de repetición donde los alumnos repiten y repiten las tablas hasta la saciedad. Un día, llega el que parece ser el director del centro al aula y le dice a la profesora que debe de integrar las nuevas tecnología en el aula, que con ellas se puede alcanzar una educación por excelencia.

Una semana después se ve la clase totalmente equipada con herramientas tecnológicas: un ordenador para cada niño, una pizarra digital con proyector, una televisión... pero ¡problema! la metodología sigue siendo la misma. La profesora sigue haciendo que los alumnos repitan las tablas teniendo los ordenadores delante.

Se busca la innovación, el avance, pero aunque se hayan introducido las nuevas tecnologías se sigue con el método tradicional de enseñanza y por mucha tecnología que se introduzca no podemos caer en el error de que con eso ya basta, de que con eso ya hemos innovado.

La escuela del mañana tiene que transformarse, se tienen que utilizar los nuevos métodos de enseñanza pero atendiendo a las nuevas necesidades del educando.

Introducir las tic sin provocar cambios en la metodología no sirve de nada. Con lo cual, yo llego a la conclusión de que sí, mucha tecnología pero sino cambiamos la forma de enseñar ¡nos quedamos tal cual estamos!

Hay que introducir las TIC y adaptarlas a las nuevas necesidades de los alumnos. Ahora ya no vale una lección magistral, ni un proceso de aprendizaje basado en el estímulo-respuesta, ni tampoco un modelo de enseñanza de emisión-recepción.

En el siglo XXI debemos usar el constructivismo. Como maestros tenemos que ser mediadores entre el conocimiento y el aprendizaje de los alumnos. Debemos compartir nuestras experiencias y saberes en una actividad conjunta de construcción de los conocimientos.

 Tenemos que ser personas reflexivas que pensamos de manera crítica sobre nuestro trabajo en el aula, ser capaces de tomar decisiones y solucionar problemas. Ser también conscientes y analizar las ideas sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje. Estar abiertos a los cambios y a cualquier innovación. Promover los aprendizajes significativos, que tengan sentido y sean realmente útiles y aplicables en la vida cotidiana del educando. Ser capaces de prestar una ayuda pedagógica pertinente a la diversidad de características, necesidades e intereses de nuestros alumnos. Nuestra meta es lograr la auntonomía y autodirección de los educandos, la cual se da con al apoyo del proceso gradual para transferir de manera ascendente el sentimiento de responsabilidad y autorregulación en éstos, es decir tenemos que preocuparnos por fomar niños autodidáctas. Y por último, enemos que facilitar el conocimiento, dando a los alumnos los andamiajes necesarios para acceder, lograr, alcanzar y en consecuencia construir aprendizajes significativos.

Continuar con lo mismo, cambiando sólo el soporte hace que todo siga igual...